La opción que lidera Javier Arenas sube 3,9 puntos y logra 52 diputados; los socialistas pierden 8,1 puntos y cinco escaños
La crisis económica, el cansancio del electorado y los cambios al frente de la Presidencia de la Junta amenazan con cobrar una cara factura al Gobierno socialista en Andalucía. Si el año pasado se atisbaban los deseos de cambio en los sondeos elaborados para el Día de Andalucía, en los de este año se registra un vuelco electoral en toda regla en favor del PP, que vencería al PSOE si ahora se celebraran elecciones autonómicas por 2,1 puntos, quedándose a apenas tres escaños de la mayoría absoluta (55 diputados) en el Parlamento andaluz.
Es el principal dato de la encuesta que, con motivo del 28-F, ha elaborado para ABC el Instituto de Investigación, marketing y comunicación IMC. El barómetro recoge un significativo revés del PSOE, que perdería las elecciones por vez primera en caso de que hoy hubiera una cita con las urnas, al conseguir 51 escaños frente a los 52 diputados que obtendría el PP.
La singularidad de este sondeo estriba en que tiene lugar en pleno ecuador de la VIII Legislatura -está previsto que las elecciones autonómicas se celebren en la primavera de 2012-, y en que coincide con los aires de cambio político que ya se vienen recogiendo en otras encuestas que se han hecho públicas en los últimos meses. Además, estos resultados no hacen más que ratificar la subida que viene experimentando el PP desde que las elecciones de 2008, en las que el partido liderado por Javier Arenas ya obtuvo los mejores resultados de su historia con 47 diputados autonómicos.
En porcentaje de votos, según la encuesta, el PSOE perdería 8,1 puntos respecto al 48,2% conseguido en 2008, mientras que el PP subiría 3,9 puntos porcentuales respecto al 38,6% de respaldo electoral logrado en las elecciones. IU se quedaría con los resultados que obtuvo en 2008 (6 escaños), subiendo apenas dos décimas. Con una salvedad, la federación de izquierdas perdería el escaño que consiguió en 2008 por la provincia de Huelva, el que permitió que su coordinador andaluz, Diego Valderas, lograra ser diputado autonómico; aunque lo ganaría por la provincia de Jaén, que actualmente no tiene representación en la Cámara autonómica.
En cuanto a los andalucistas, aunque ya han anunciado su intención de reagruparse (PA más PSA) siguen sin representación en el Parlamento, tal y como ocurrió en las elecciones andaluzas de 2008, incluso bajan dos puntos desde entonces.
Crece el desencanto
Llama la atención que, si bien el crecimiento del PP es notable respecto a los resultados de 2008, la subida no es tan llamativa respecto al sondeo de IMC del 2009 (apenas tres décimas). La pérdida de apoyo del PSOE sí es progresiva y, de la encuesta de 2009 a la de hoy, descienden 5 puntos. Curiosamente quien más gana respecto al barómetro del año pasado es el grupo de encuestados que optan por votar a «otros partidos» o simplemente votan en blanco. O, lo que es lo mismo, donde se van los votos que pierde el PSOE es a la bolsa de los desencantados, que bien votan a formaciones como UPyD, o simplemente expresan su malestar con el PSOE votando en blanco. Este grupo aumenta casi seis puntos respecto a las elecciones de 2008 y 4,2 puntos respecto al sondeo de 2009.
En todo caso, el crecimiento electoral del PP, que pondría fin a casi tres décadas de gobiernos socialistas consecutivos en Andalucía, se percibe en las ocho provincias andaluzas, donde suben de manera notable, lo que supone que crezca su número de diputados en cinco de las ocho provincias. Así, en Almería (provincia por la que se presentó Javier Arenas en 2008), Sevilla, Huelva, Granada y Cádiz, el PP podría conseguir un parlamentario más de los que tiene actualmente, mientras que en Málaga, Córdoba y Jaén se quedarían con los que cuentan hasta ahora.
Porcentualmente, superaría al PP en Córdoba, Huelva, Jaén y Sevilla. No obstante el respaldo que lograrían los socialistas en las ocho provincias andaluzas desciende considerablemente respecto a los resultados electorales de hace dos años, con casos como el de Almería donde descienden diez puntos, en Cádiz bajan ocho puntos porcentuales, en Córdoba cuatro, doce en Granada, cinco en Huelva, nueve puntos en Jaén, cinco en Málaga y siete puntos porcentuales en Sevilla.